KUNG FU TRADICIONAL DE LA MANTIS RELIGIOSA

KUNG FU TRADICIONAL DE LA MANTIS RELIGIOSA

jueves, 22 de abril de 2021

MA BU 马 步

 Tanglangquan Zhuang Bu 螳螂拳桩步

(Posiciones del estilo Mantis)

Maestro Carlos García

En el amplio abanico del Wushu-Kungfu hay una gran variedad de posiciones. Las posiciones son la base (cimientos) en los que se sustenta la estructura general del cuerpo. La posición atrae fortaleza al cuerpo, el cuerpo a través de la cintura y la columna emite la energía hacia los omoplatos, siendo estos en última instancia los encargados de proyectar la energía hacia el exterior a través del puño o palma.   Antes de entrar en materia técnica, vamos a comentar un tema importante relacionado con los términos “Bu” y “Shi”. El primero “Bu” Significa paso y hace referencia al paso entre una posición y otra; es decir “Bu” seria el paso por adoptar. Mientras que “Shi” quiere decir la posición ya adoptada, llega y permanece uno inmóvil. Aclarado los términos, cuando un estudiante toma contacto por vez primera con el Wushu-Kungfu debe de estudiar el método conocido como “Jia Shi” (estructura de postura). Este trabajo consiste en el fortalecimiento de las piernas (músculos, tendones y ligamentos), de manera inteligente, sin llegar a la extenuación. De ahí el lema que reza de la siguiente manera “Nunca trabajar en exceso ni tampoco con escasez”. Si se mantiene un trabajo muy intenso y duro las piernas se pueden volver muy pesadas, dificultando el desplazamiento. Y con los años el exceso postural puede acarrear lesiones en los ligamentos y articulaciones de la rodilla. Por el contrario, si no se trabajan suficientemente estas posiciones se convertirán débiles, cansadas e inestables. En definitiva, la estructura general del cuerpo será pobre.   

En dicho trabajo lo que se pretende es buscar la fijación en el suelo o lo que se conoce como “hundimiento”, adoptando posiciones bajas (dentro de un parámetro establecido), evitando cualquier tipo de tensión corporal.  La práctica inteligente en el estudio de las posiciones pasa por trabajar las posturas durante un tiempo no muy extenso con la finalidad de conseguir fortaleza física y energía muscular. Una vez alcanzada esta meta, se procede a hallar la fijación, es decir el “enraizamiento”, siendo este el objetivo último en el trabajo Jia Shi. Para conseguir este segundo nivel lo primero que se debe de practicar es la relajación, después se debe de prestar muchísima atención a las dos piernas, teniendo como principios la correcta situación de los pies, una distribución clara del peso y un enfoque claro del recorrido de la energía en el cuerpo. Finalmente se siente el cuerpo como un movimiento único.    

Finalizado este proceso de entrenamiento, se pasa a ejercitar los desplazamientos Zuang Bu. En esta etapa el practicante debe de estudiar como desplazarse con viveza y agilidad, y para ello existen en el boxeo de estilo Mantis métodos que permiten dicho acondicionamiento. Mucha gente, cuando practica Kung Fu, busca que el maestro le enseñe un secreto, ignorando por completo que el verdadero secreto del arte se ubica en el uso correcto de las posiciones y sus pasos. Aunque este trabajo a simple vista parezca inicial y básico, es un trabajo muy importante y con el tiempo el practicante verdadero entiende que ejercitar los pasos ha sido un verdadero secreto. Por lo tanto, se requiere de paciencia y voluntad para alcanzar grandes logros. Como bien decía el maestro Liu Yun Qiao: “Cada éxito individual depende del nivel de trabajo duro y de la voluntad”.    

El estudio serio de los Zuang Bu se reflejará en nuestro Wushu. Cuando uno no invierte tiempo para ello el movimiento se ve y se siente vacío. Sin embargo, si dedicamos tiempo y energía, nos sentiremos poderosos y seguros en nuestros movimientos. Este es el verdadero secreto, la practica inteligente de la estructura Jia Zhi o Zuang Bu.

Por lo general los diferentes estilos de kungfu del norte manejan las mismas posiciones que en el estilo Mantis. Algunas de ellas son muy frecuentes como la posición de Mabu, Gongbu, Manmabu, Tulibu, etc. Otras como la posición de las 7 estrellas (Qixingbu) del estilo mantis, puede verse en otros estilos, pero con menos representatividad que en el mencionado boxeo. Incluso en el amplio abanico de los estilos de mantis pueden verse a menudo estilos como el Qixingtanglang, donde frecuentemente se realzan posiciones de 7 estrellas o por el contrario ver en el estilo Babutanglang, el paso de escape o la posición de Ruhuanbu por excelencia. 

 A la hora de trabajar las posiciones tendremos que hacer frente a las consideraciones tanto generales como propias, para poder hacer un buen uso de ellas.  Siendo estos algunos de los puntos a destacar: - La columna por lo general debe de permanecer derecha. La inclinación exagerada producirá tensión en la columna y un deficiente equilibrio en la posición.  - En la gran mayoría de las posiciones la distancia es por lo general más ancha que los hombros. Así se obtiene una buena base. (En algunas escuelas como la nuestra, se obtiene la medida exacta a partir de una anchura obtenida a través de la medida que existe entre la punta del dedo gordo del pie con la rodilla y dedos del pie trasero). Todas las posiciones tienen una altura recomendada, que por lo general se busca a través de los triángulos equiláteros que se obtiene de los vértices comprendidos entre los talones, rodillas, cóccix y caderas.   Cuando un bloque de secuencias se termina, se puede efectuar una posición bien baja. Sin embargo, si esta es baja en todos los movimientos, será pesada y lenta. En los estilos de mantis los pasos deberían de ser como los de una bicicleta. No sé es eficiente en los pasos si se llegan a marcar con demasía. Sólo aquellas posturas que derriban al oponente o que exteriorizan una pegada corta deben ser como la raíz de un árbol. Por lo general las rodillas siguen la línea de la punta del pie. Este hecho evitara lesiones en los meniscos y ligamentos. En combate permite hacer palancas al oponente.  A la hora de realizar las posiciones no únicamente se aplican como tales, sino que además pueden tener carácter defensivo u ofensivo dependiendo de cuál sea nuestra iniciativa o de cómo venga el oponente.

Si entendemos el mecanismo de trabajo tendremos un 90% de efectividad en el combate real…

                                          

                                                   Mǎ Bù  (Paso de montar a caballo)

Eleve el brazo derecho por encima de su cabeza. 

De inmediato saque el puño izquierdo en la línea lateral con puño vertical.

Desplácese con su pie izquierdo hasta adoptar la posición de Mabu.


                                   


Qi Ma Bu o Shì Mǎ Shì 馬式, que es también como se llama, se traduce como “paso de montar a caballo”.  Para buscar la separación de los pies se apoya la planta del pie izquierdo bien afincada al suelo con los dedos al frente, mientras se flexiona la rodilla derecha y se lleva al lado del dedo gordo del pie izquierdo. La separación que existe entre el dedo gordo del pie y los dedos del pie derecho es la distancia que deberá tomar. Se sitúan los pies paralelos y al frente. Se flexiona las rodillas hasta buscar un triángulo equilátero con los talones, cóccix y rodillas. Las rodillas ligeramente hacia adentro para permitir la circulación de la energía entre los meridianos vaso gobernador y vaso concepción.  El peso recae en los talones sin levantar las puntas de los pies. Se bascula la pelvis ligeramente hacia delante para masajear los riñones, y crear la energía (yin de riñón). La columna totalmente recta, el mentón ligeramente hacia adentro, la cabeza como si estuviese suspendida de un hilo. La energía original y la energía natural se reúnen para conectar con el cielo. El peso se reparte 50% en las dos piernas.

En esta posición en particular se trabajan las energías de Agua ayuda a Madera, Madera ayuda a Fuego.

AGUA-RIÑÓN: Bascule su pelvis y hunda sus riñones. El movimiento exacto requiere que los costillares inferiores no sesguen estos órganos e impidan de esta manera su reposo y llenado de energía y sangre.

MADERA-HÍGADO: Extienda su brazo izquierdo hacia delante y hasta la altura del hombro. Posicione su puño verticalmente e inclinado ligeramente hacia abajo. Abra el costillar izquierdo, esto facilitara el flujo de sangre y energía del hígado.

FUEGO-CORAZÓN: Ascienda su brazo derecho por encima de su cabeza (a un puño aproximadamente). Este movimiento le permitirá abrir el esternón y de esta manera producir un masaje en el pericardio que por ende se verá beneficiado el propio corazón.

Por consiguiente, los movimientos esenciales para el estudio de las energías residen en la implicación exacta del CÓCCIC, COSTILLARES Y EXTERNÓN.

Maestro Carlos García